Un cuento sobre cómo establecer prioridades: “¿Cuáles son las piedras grandes en tu vida?”

“Nunca encuentro tiempo para las cosas importantes”. ¿Te suena? Yo durante muchos años fui protagonista de esa frase o una muy parecida. Si es tu caso, si no encuentras tiempo para tus prioridades, para actividades o tareas que te gustaría hacer, para cumplir tus sueños, te propongo leer el siguiente cuento…

Un cuento sobre cómo establecer prioridades…

piedras grandes y pequeñas«Un día, un anciano profesor fue llamado como experto para hablar sobre la planificación más eficaz del tiempo a los mandos superiores de algunas importantes empresas norteamericanas. Entonces decidió probar un experimento. De pie, sacó de debajo de la mesa un gran vaso de cristal vacío. A la vez tomó también una docena de grandes piedras que colocó con delicadeza, una por una, en el vaso hasta llenarlo. Cuando ya no se podían meter más, preguntó a los alumnos: «¿Les parece que el vaso está lleno?», y todos respondieron: «¡Sí!». Esperó un instante e insistió: «¿Están seguros?».

 Se inclinó de nuevo y sacó de debajo de la mesa una caja llena de gravilla que echó con precisión encima de las grandes piedras, moviendo levemente el vaso para que se colara entre ellas hasta el fondo. «¿Está lleno esta vez el vaso?», preguntó. Más prudentes, los alumnos comenzaron a comprender y respondieron: «Tal vez aún no». «¡Bien!», contestó el anciano profesor. Se inclinó de nuevo y sacó esta vez un saquito de arena que, con cuidado, echó en el vaso. La arena rellenó todos los espacios que había entre las piedras y la gravilla. Así que dijo de nuevo: «¿Está lleno ahora el vaso?». Y todos, sin dudar, respondieron: «¡No!». En efecto, respondió el anciano, y, tal como esperaban, tomó la jarra que estaba en la mesa y echó agua en el vaso hasta el borde.

Se inclinó de nuevo y sacó de debajo de la mesa una caja llena de gravilla que echó con precisión encima de las grandes piedras, moviendo levemente el vaso para que se colara entre ellas hasta el fondo. «¿Está lleno esta vez el vaso?», preguntó. Más prudentes, los alumnos comenzaron a comprender y respondieron: «Tal vez aún no». «¡Bien!», contestó el anciano profesor. Se inclinó de nuevo y sacó esta vez un saquito de arena que, con cuidado, echó en el vaso. La arena rellenó todos los espacios que había entre las piedras y la gravilla. Así que dijo de nuevo: «¿Está lleno ahora el vaso?». Y todos, sin dudar, respondieron: «¡No!». En efecto, respondió el anciano, y, tal como esperaban, tomó la jarra que estaba en la mesa y echó agua en el vaso hasta el borde.

En ese momento, alzó la vista hacia el auditorio y preguntó: «¿Cuál es la gran verdad que nos muestra ese experimento?». El más audaz, pensando en el tema del curso (la planificación del tiempo), respondió: «Demuestra que también cuando nuestra agenda está completamente llena, con un poco de buena voluntad, siempre se puede añadir algún compromiso más, alguna otra cosa por hacer».

«No –respondió el professor–; no es eso. Lo que el experimento demuestra es otra cosa: si no se introducen primero las piedras grandes en el vaso, jamás se conseguirá que quepan después». Tras un instante de silencio, todos se percataron de la evidencia de la afirmación. Así que prosiguió:

«¿Cuáles son las piedras grandes, las prioridades, en su vida? ¿La salud? ¿La familia? ¿Los amigos? ¿Defender una causa? ¿Llevar a cabo algo que les importa mucho? Lo importante es meter estas piedras grandes en primer lugar en su agenda. Si se da prioridad a miles de otras cosas pequeñas (la gravilla, la arena), se llenará la vida de nimiedades y nunca se hallará tiempo para dedicarse a lo verdaderamente importante.

Así que no olviden plantearse frecuentemente la pregunta:

“¿Cuáles son las piedras grandes en mi vida?” y situarlas en el primer lugar de la agenda». A continuación, con un gesto amistoso, el anciano profesor se despidió del auditorio y abandonó la sala».

 

6 Comments

  1. Trinidad Gimeno de Carlos el 18 de julio de 2012 a las 16:13

    Este cuento tan didáctico lo utilizo en algunas de mis charlas, le añado un dato más, de mi cosecha, el agua que baña todas las piedras es el amor que debe empapar la acción para llevar a cabo nuestros objetivos.



    • guadalupedelamata el 18 de julio de 2012 a las 16:31

      Que bonito Trini… me encanta! lo añadiré yo también y si tienes más ideas que compartir… encantada de recibirlas! besos



  2. Marisol el 13 de julio de 2013 a las 06:50

    Muy buena enseñanza,deseo aplicarla a mi vida,mil gracias.



    • guadalupedelamata el 9 de noviembre de 2013 a las 12:33

      Gracias Marisol! ya nos contarás qué tal te va la aplicación de estas ideas.



  3. J el 9 de noviembre de 2013 a las 10:51

    Mejor que agua, bañar todo con cerveza: esto quiere decir, que aún cuando parece que el bote está lleno del todo, siempre hay tiempo para un par de cervezas con un amigo.



    • guadalupedelamata el 9 de noviembre de 2013 a las 12:35

      J, me encanta ese final para el cuento! mucho mejor terminar siempre con unas cervezas en buena compañía! gracias